Desde el día anterior al lanzamiento de la investigación periodística que expuso los presuntos delitos de acoso sexual hacia estudiantes por parte Víctor Quijada Tacuri, las periodistas Graciela Tiburcio Loayza y Luciana Távara Bermejo, del portal Wayka.pe, comenzaron a recibir llamadas y mensajes intimidantes desde el teléfono personal del candidato, quien las amenazó con presentar cargos en su contra en caso de avanzar en la publicación de la investigación. Durante la preparación de la nota periodística, Tiburcio Loayza se había comunicado con Quijada Tacuri para ofrecer el espacio a su descargo sobre las denuncias en su contra, pero el candidato se negó a contestar las preguntas y profirió la primera amenaza de querella judicial.
A partir de ese 25 de febrero, fecha en la que fue radicada en el Poder Judicial peruano la querella contra las periodistas y las denunciantes de Quijada Tacuri, las amenazas, intimidaciones y cyber-acoso fueron en aumento. El acusado por acoso sexual y ahora querellante candidato a congresista, en una serie de publicaciones en sus redes sociales comenzó a compartir fotos y perfiles de las personas que denunció ante la justicia.
El pasado 2 de marzo, tal como informa el portal Wayka.pe, el medio donde trabajan Tiburcio y Távara recibió imágenes de “presuntas coordinaciones entre Víctor Quijada y otro hombre de nombre Jerson, quien indica que puede hacer cualquier tipo de trabajo, incluido el de matar personas”.
Al día de hoy, el hostigamiento sobre las periodistas continúa en aumento y partidarixs de Quijada organizan acciones de cyber-acoso en las redes personales de Graciela Tiburcio.
Zuliana Lainez, Secretaria General de la Asociación Nacional del Perú, declaró que desde la ANP rechazan “toda forma de hostigamiento contra nuestras colegas Graciela Tiburcio y Luciana Távara de Wayka. Ninguna periodista debe ser violentada por hacer su trabajo. No se trata solo de la persecución judicial, sino el acoso en redes por su condición de periodistas y mujeres, además de amenazas. Instamos desde la ANP al Ministerio de Justicia para que active de inmediato el protocolo de defensor de defensores/as en favor de las periodistas.”
Desde la Federación Internacional de Periodistas, recordamos que es fundamental comprender las acciones de hostigamiento hacia nuestras compañeras periodistas desde una perspectiva de género: la persecución judicial de las que son objeto no constituye solamente una gravísima agresión a las libertades de expresión e información, sino que también es una forma de disciplinamiento hacia las personas que presentaron denuncias sobre acosos sexuales y hacia quienes dieron una voz a esas denuncias.
Ante el hostigamiento recibido por Graciela Tiburcio Loayza y Luciana Távara Bermejo, desde la FIP reclamamos al Estado peruano la inmediata provisión de las medidas de seguridad necesarias para asegurar la vida y la integridad física de ambas comunicadoras. Dar los medios necesarios para su seguridad es una obligación inalienable en cualquier Estado de derecho.
Exigimos la inmediata protección de nuestras colegas y garantías para quienes alumbran hechos de violencia basada en género.