La FIP expresa su preocupación por recientes amenazas a la libertad de prensa en Latinoamérica y el Caribe

La Federación Internacional de Periodistas ve con alarma los avances contra la libertad de expresión y contra los derechos de los trabajadores de prensa en Venezuela, Costa Rica y República Dominicana, países que en los últimos días han sido escenario de despidos y cierres de medios.

En Costa Rica se ha dado en los últimos meses un fuerte proceso de despidos, desinversión y cierre de medios de comunicación, que pueden resumirse en:

Despido de periodistas en Canal 9 (año 2014)

Cierre del impreso de La Prensa Libre (1 de enero del 2015)

Diario decano de Costa Rica que transformó su formato a digital

Cierre del periódico Al Día, especializado en deportes (30 de noviembre)

Cierre de Radio ADN (dejará de transmitir su noticiero el próximo 30 de abril)

El periódico Al Día y RADIO ADN son pertenecientes del grupo español Prisa, que al comprar los medios recientemente al Grupo Nación ha dejado decenas de periodistas sin trabajo y disminuido la pluralidad informativa en medios de comunicación.

Existen actualmente en Costa Rica grandes grupos de medios que se distribuyen la mayor parte del espectro mediático: Canal 7 y Canal 6 del grupo REPRETEL (cubriendo alrededor del 90% del total de la publicidad), Central de Radio del grupo REPRETEL (con más de 20 emisora) y Grupo Nación-Prisa y Grupo Extra, que acaparando el espacio de la prensa escrita.

Tal como sostuvo el Sindicato Nacional de Periodistas de Costa Rica en un comunicado, “el fortalecimiento de la democracia debe ser una preocupación de todos y de todas, y sin una pluralidad de medios de información esa democracia se debilita”.

La situación de despidos y cierres se ha producido por un conjunto de variables que incluyen la crisis económica, la metamorfosis de la estructura de los medios y la desinversión, la concentración de medios, la preeminencia de medios con una postura ideológica liberal marcada y la baja tasa de sindicalización producto del sistema imperante.

Otro caso que resulta de extrema preocupación es el despido del periodista y dirigente del Sindicato de Trabajadores de Prensa de República Dominicana (SNTP) Francis Pérez, quien fue desvinculado de la Dirección de Prensa del Fondo Patrimoniales de la Empresas Reformadas (Fonper) luego de publicar un artículo en donde critica la intención de modificar la constitución de la República para permitir la reelección presidencial.

En solidaridad con el SNTP de República Dominicana, la FIP considera el despido como arbitrario y violatorio del derecho a la libertad de expresión, sosteniendo que resulta de extrema gravedad que un periodista sea expulsado de su puesto de trabajo por disentir o por expresar su ideas públicamente.

Venezuela también ha sido escenario de despidos: este es el caso del dirigente sindical y trabajador del diario Última Hora Jesús Hurtado, quien como integrante del Sindicato Nacional de Trabajadores de Prensa de Venezuela contaba con fueros sindicales que impedían su remoción del puesto de trabajo. El motivo aparente de su despido habría sido la publicación en redes sociales de opiniones personales contrarias a la línea editorial de su empresa.

La FIP observa con preocupación estos hechos violatorios de los derechos fundamentales de expresión y prensa, ejes fundamentales de una sociedad libre y democrática, y exhorta a las autoridades correspondientes a tomar las medidas necesarias para la reparación de estos acontecimientos.