Brasil: reforma laboral afecta los derechos de trabajadores y trabajadoras

Votación de reforma laboral en el Senado de Brasil, el 11 de julio de 2017. Foto: Evaristo SA/AFP.

La polémica reforma laboral aprobada esta semana por el Parlamento brasileño flexibiliza las normas de contratación y la rescisión de contratos, mientras determina la preeminencia de los convenios a nivel de empresa por sobre la legislación. FENAJ indica que la nueva ley viola acuerdos suscritos con la OIT.

Los y las periodistas, así como el conjunto de trabajadores del sector de prensa y de las demás ramas de la economía brasileña, prevén fuertes modificaciones en sus condiciones de trabajo y en su estabilidad laboral a partir de las modificaciones que viene a introducir la nueva normativa sancionada.

En efecto, la relación capital-trabajo comenzará a estar regida por principios basados en la flexibilización laboral, tal como lo sugieren los aspectos más sobresalientes de la nueva ley, otorgándole a la patronal mayores márgenes de discrecionalidad en el vínculo con sus empleados.

Además de la flexibilización en los modos de contratación (promoviendo el contrato individual en condiciones de sobreexplotación) y despido, se amplía la tercerización, se introducen la jornada intermitente, la institucionalización del banco de horas, así como la habilitación de mujeres embarazadas o en período de lactancia para realizar trabajo insalubre, entre otras disposiciones.

Tal como lo ha hecho trascender la Federación Nacional de Periodistas (FENAJ, por sus siglas en portugués), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha indicado, luego de un minucioso análisis, que el proyecto aprobado esta semana viola los convenios 98 (negociación colectiva), 151 (negociación colectiva para empleados públicos), 154 (promoción de la negociación colectiva) y 155 (seguridad y salud de los trabajadores) de OIT ratificados por el Estado brasileño.

Maria José Braga, presidenta de la FENAJ, asevera que la reforma es un desmonte de la Consolidación de las Leyes del Trabajo (CLT) sancionada por Getúlio Vargas en 1943. Distintos analistas coinciden en que la nueva normativa retrotrae al país sudamericano a un estatus, en materia de derecho laboral, correspondiente con los inicios del siglo pasado.

Asimismo, la ley quita el carácter obligatorio que tenía el aporte sindical, equivalente a un día de trabajo al año. A partir de ahora dicho aporte será opcional. A propósito, Braga afirmó: “El trabajador brasileño quedará, a partir de la entrada en vigor de la reforma, totalmente desprotegido desde el punto de vista legal y esta vulnerabilidad aumenta con las medidas de debilitamiento de las organizaciones sindicales que están incluidas en la reforma”.

La Federación Internacional de Periodistas (FIP), organización que nuclea a 600.000 trabajadores y trabajadoras de prensa en todo el mundo, se une a su afiliado, FENAJ, en el repudio a la reforma flexibilizadora impulsada por el actual gobierno de Michel Temer y aprobada esta semana en el Parlamento. Un retroceso de tales magnitudes en la normativa que rige las relaciones desiguales entre el capital y el trabajo no puede ser avalado por aquellos que pretenden una sociedad más justa y equitativa basada en condiciones de vida y de trabajo dignas para la población.

 


  Para más información, contactar con la FIP en el tlf. + 32 2 235 22 16

La FIP representa a más de 600.000 periodistas en 140 países

Sigue a la FIP en Twitter y Facebook

Suscríbete a las noticias de la FIP