Desde FIP repudiamos los más de 300 despidos que empresas de medios uruguayas han dispuesto en los últimos días y apoyamos a nuestro afiliado, la Asociaciòn de la Prensa Uruguaya (APU), que releva los casos y prepara denuncias de ser necesario. “Nos preocupa que en esta situación algunas empresas amplifiquen la crisis por el COVID19 y aprovechen para depurar la plantilla. Si así lo hicieran lo denunciaremos, vamos a hacer un seguimiento”, afirmó el presidente de APU, Fabián Cardozo.
Hacemos extensiva nuestra solidaridad a todxs lxs afiliadxs de FIP en América Latina y el mundo e insistimos con la importancia que en tiempos de crisis y confusión tiene lxs periodistas que deben cubrir las novedades de una pandemia que es prioridad de todo el mundo.
Sostenemos la convicción de que el acceso a la información es un derecho humano y advertimos que la pobre circulaciòn de información sanitaria es una de las peores falencias posibles en estos tiempos de riesgo para la salud de millones de personas.