Durante la tarde de ayer, el periodista de AlterPresse Edner Fils Decime fue secuestrado por un grupo fuertemente armado cuando se desplazaba en un vehículo en el que también había al menos otras cuatro personas que también fueron raptadas. Hasta ahora no se tienen novedades de la situación del comunicador, ni se saben los motivos por los cuáles fue privado de su libertad. Todo esto sucedió en Delmas, una localidad de la capital haitiana.

Haití atraviesa una enorme crisis política y social, que ya era grave antes del magnicidio del presidente Jovenel Moïse a mediados de 2021, pero que continuó profundizándose luego del mismo. En el último año han sido asesinados cuatro periodistas: Diego Charles, Wilguens Louis-Saint, John Wesley Amady y Maxihen Lazzare. La situación de lxs trabajadorxs de prensa en el país es muy precaria y cada cobertura resulta peligrosa, porque informar sobre la violencia que azota al país lxs expone ante las bandas criminales que se disputan el control territorial.

La falta de cobertura de los medios de comunicación extranjeros, que es fruto del abandono y el desinterés de la comunidad internacional que históricamente afecta a Haití, y las limitaciones que tienen los medios locales para informar por el peligro que ello implica, tiene como resultado una gran dificultad para encontrar información actualizada sobre la situación de nuestro colega.

La AJH, organización afiliada a la Federación Internacional de Periodistas (FIP), se expresó sobre lo sucedido: “La AJH está muy preocupada por la degradación de la seguridad en el país. Ahora hasta lxs periodistas están siendo marcados por el crimen organizado. Le exigimos a las autoridades que garanticen la seguridad de toda la población. Haití no puede ceder ante esta inaceptable situación. Demandamos la libertad de Edner Decime sin condiciones. Edner debe ser liberado de inmediato”.

La FIP acompaña el reclamo de la AJH y exige que tanto nuestro colega como el resto de las personas secuestradas sean liberadxs de manera urgente. También demandamos a las autoridades que implementen medidas de emergencia efectivas para proteger a todxs lxs trabajadorxs de prensa, que tienen un rol imprescindible para dar a conocer lo que sucede en uno de los territorios más castigados del mundo.