La Federación Internacional de
Periodistas, FIP, y su organización regional, la Federación de Periodistas de
América Latina y el Caribe FEPALC, expresan y gritan de nuevo su mayor
indignación y consternación ante los asesinatos de otros tres profesionales de
la información en México. Los periodistas asesinados son María Marcela Yarce
Viveros, fundadora y reportera de la revista Contralínea, Rocío González
Trápaga, que fuera reportera de Televisa, y Humberto Millán Salazar,
periodista radial y de la publicación electrónica A discusión, que fue
asesinado el pasado 25 de agosto. En un comunicado, FEPALC precisa que todo
ello sucede "sin que a la fecha tengamos noticias de una acción efectiva del
gobierno para detener esta práctica sistemática de aniquilamiento".
"Denunciamos la manera especialmente
cruel y el ensañamiento, que queda especialmente claro en el caso de las dos
últimas colegas asesinadas, MaríaMarcela Yarce y Rocío González
Trápaga, quienes aparecieron maniatadas y desnudas", ha declarado Beth Costa,
Secretaria General de la FIP: "Pedimos a la comunidad internacional que
presione al gobierno mexicano para que establezca medidas efectivas contra los
asesinatos de periodistas y para que esos crímenes sean investigados, a fondo y
en todos los casos. Hay que terminar con la impunidad".
La FIP recuerda que los trabajadores
de Contralínea ya habían sufrido acosos y amenazas en otras ocasiones,
durante los nueve años de vida de dicha publicación que ha abordado con
frecuencia temas difíciles y relativos a la corrupción.
En su comunicado de condena, FEPALC
afirma: "No queremos más declaraciones, ni compromisos públicos con la libertad
de expresión, exigimos resultados de las investigaciones. ¿Qué conclusiones
tienen del crimen del periodista Humberto Millán Salazar, asesinado el 25 de
agosto? La FEPALC teme que las autoridades mexicanas dilaten tanto los procesos
que unos casos terminen haciendo invisibles los crímenes anteriores y, por
ende, resignándolos a la impunidad". También se pide "romper el círculo
crimen-impunidad-autocensura" para dejar al descubierto y castigar, con todo el
peso de la ley, "a los responsables materiales e intelectuales de tan horrendos
hechos".
La FIP y la FEPALC declaran que
acompañarán las acciones de su organización afiliada en México, el Sindicato
Nacional de Redactores de la Prensa, hasta lograr que todas las muertes
violentas de periodistas sean esclarecidas.
Si desea más información, puede contactar con la FIP en el teléfono + 32 2 235
22 07
La FIP representa
a más de 600.000 periodistas en 131 países