Brasil: despidos masivos en el Grupo Abril por el cierre de 9 revistas

El mayor editor de revistas de Brasil anunció el cierre de 9 de sus 24 títulos, dejando sin empleo a más de 500 trabajadorxs. La Federación Internacional de Periodistas (FIP), organización que representa a 600.000 comunicadores y comunicadoras en el mundo, se solidariza con lxs colegas desvinculadxs e insta a las autoridades que intercedan para frenar esta embestida sobre los derechos laborales de lxs trabajadorxs.

Un cliente observa portadas de revistas en un kiosko de Brasil. Antonio Escorza / AFP

El mayor editor de revistas de Brasil anunció el cierre de 9 de sus 24 títulos, dejando sin empleo a más de 500 trabajadorxs. La Federación Internacional de Periodistas (FIP), organización que representa a 600.000 comunicadores y comunicadoras en el mundo, se solidariza con lxs colegas desvinculadxs e insta a las autoridades que intercedan para frenar esta embestida sobre los derechos laborales de lxs trabajadorxs.

El grupo anunció mediante un comunicado oficial que como parte de un proceso de reestructuración, reformará el portafolio de marcas de la editora con el objetivo de garantizar su salud financiera en un ambiente de profundas transformaciones tecnológicas, cuyo impacto recae en el sector de comunicación. De este modo, se cerrarán 9 de los 24 semanarios que la firma edita hasta el momento dejando sin empleo a más de 500 trabajadorxs de prensa.

La empresa multimediática concentrará todos sus esfuerzos en las 15 revistas en las que es líder en el mercado, como el semanario informativo Veja, uno de los de mayores ventas en el mundo, la revista económica Exame, la femenina Claudia, la masculina VIP, la deportiva Placar y la de vehículos Quatro Rodas. Entre las que dejarán de circular, se destacan las femeninas Elle y Cosmopolitan, las de arquitectura Casa Claudia y Minha Casa, y la de salud Boa Forma.

Esto no se trata de un hecho aislado, ya que el Grupo viene anunciando medidas de recorte desde el año pasado para hacer frente a una abultada deuda que llegaba a 1,300 millones de reales (unos 351.4 millones de dólares) y a continuos resultados negativos.

La FIP se solidariza con lxs trabajadorxs desvinculadxs y llama a la empresa de medios a terminar con estas prácticas que inciden en la vida laboral de sus trabajadorxs, afectando el derecho a la libertad de expresión y amenazando las bases de una democracia íntegra. El recorte para salvar la situación económica de la compañía no es justificatorio de tal embestida contra los derechos laborales.


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